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Music
El lado más oscuro de Ladytron
24.02.2019
Por Irving Alfaro

Después de casi ocho años de ausencia, los ingleses de Ladytron regresan con un disco homónimo lleno de maldad, desesperanza, nihilismo y pesadez, que refleja muy bien el sentir de la humanidad desde hace unos siete u ocho años debido al cambio climático, desastres naturales, terrorismo, grupos radicales, el brexit, etc. Aunque, por otro lado, mantienen vivo ese velo de oscuridad y misterio detrás de las voces de sus vocalistas: Helen Marnie y Mira Aroyo.

El disco se escribió, planeó y armó de manera remota en Chicago, Liverpool y Sao Paulo, lugar en donde residen algunos de los integrantes de la banda, motivo por el cual muchas pistas, demos y maquetas se enviaban por drive, mail, wetransfer y cualquier otro medio de almacenamiento, sin que esto restara solidez o cohesión a todo el disco. Cabe señalar que la banda anunció la salida de su sexto disco a través de Pledge Music, una plataforma de marketplace que destina una parte de las ganancias a proyectos de caridad, medio ambiente y/o sustentabilidad.

Las 13 canciones que componen este material son una oda a la desesperación y al sentimiento de impotencia y enojo ante un mundo al borde de la destrucción, entre las rolas que más destacan está The Animals, (primer sencillo del álbum) gracias a sus coros pegadizos y efectivos, Horrorshow, una canción con sintetizadores tan pesados que por momentos llega a parecerse a Nine Inch Nails; y Paper Highways, donde Marnie nos recuerda a través de sus letras que el día del juicio podría estar cerca:

We sleepwalk into fire


A cloud of doubt just passed us by


We hide the truth behind a screen


This fire won’t burn my dream…

They put their trust in tarot cards


New Age of Reason proved us right


Suspicion drives as nature screams


This fire won’t burn my dream

Incluso la portada del disco funciona como una metáfora de lo que la banda trata expresar: Un planeta a punto de colapsar y la humanidad corriendo hacia su propia autodestrucción con singular alegría, usando el fuego como principal catalizador del fin del mundo.

Por otro lado, canciones como Until The Fire, Far from Home, Run y Tomorrow is another day destacan como grandes momentos de introspección sonora, se nota su experiencia creando armonías simples, oscuras, etéreas y llenas de ganchos al estilo de Chvrches y School of Seven Bells (dos bandas que han sido influenciadas notablemente por Ladytron); mientras que Deadzone, Tower of Glass y You’ve Changed son simplemente maravillas perdidas entre ritmos propios del synthpop y el trance, muy efectivos para las pistas de baile.

Y aunque uno no puede evitar la sensación de desánimo, desesperación e impotencia finamente tejida a lo largo del disco, las melodías estilo electro-goth combinadas con los clásicos efectos robóticos en la voz de Helen y Mira, le dan cierto destello de luz y aire de frescura a todo el disco, que se sostiene a sí mismo con un sonido absolutamente consolidado a lo largo de sus 56 mins. de duración.

Sin duda alguna, estamos frente a uno de las mejores trabajos de la banda desde ‘Light and Magic’ de 2002, la banda hace notar sus 20 años de experiencia detrás de los sintetizadores, moogs y teclados, haciendo entrega de uno de los mejores discos en lo que va del año.

Y, por si fuera poco, Ladytron se presentará en El Plaza el próximo 27 de febrero, por lo que seguramente podremos escuchar mucho de este nuevo material en vivo, mientras caemos en el embrujo de las sirenas del Apocalipsis, en una noche especial llena de baile y oscuridad.

Calificación: 9 de 10 maullidos