Sólo fue cuestión de contemplar el paisaje para que Shinae Park creara un mundo alterno que se desprende de un campo de trigo en Jejudo, provincia de Corea. Hay veces que de la simpleza suceden las mejores ideas y el ejercicio contemplativo que Park realizó en Corea, sostuvo el interés personal en el campo de su mamá; esa belleza natural que contrasta con el ajetreo de la Ciudad de México.
Ese contraste cobra vida en Boribat –‘trigo’ en coreano– y sucede a través de una escena donde las semillas del diente de león se esparcen en el aire como si bailaran. Una melodía tranquila e imaginativa que evoca frescura y serenidad, a través de piezas como vestidos, chaquetas, falda y conjuntos de top y pantalón, altamente funcionales y atemporales que responden al valor intrínseco de la marca: la unión de dos culturas.
Como marca de moda mexicana, Shinae Park, hizo su debut oficial en Fashion Week México Primavera-verano 2018 en Altto San Ángel para dejar escrita su bandera de sofisticación, funcionalidad y libertad en 38 looks conformados por las piezas más asiduas en los guardarropas mexicanos, permitiendo una identificación inmediata con la mujer u hombre que más allá de ser consumidores, son clientes conscientes de su personalidad a través de la indumentaria.
Trabajar con conceptos simples y concretos permitió a Shinae Park mostrar las cualidades más insospechadas y subestimadas de la ropa, resaltando su minuciosa labor sobre las texturas de las fibras naturales protagónicas de la temporada: el lino y el algodón. Asimismo, la paleta de color fue exhaustivamente evaluada sobre el campo de trigo visualizado, por lo tanto, los colores como el amarillo mostaza, el verde olivo y el verde agua conviven con el marfil, el hueso, el gris y el negro para complementar esta relación inmediata del diseño, la tela y el cuerpo.
En esta entrega, Shinae Park colaboró con la firma de joyería Libélula y su respectiva nueva colección titulada ‘Saturno’, así como la inclusión del calzado Vans en sus versioens Authentic, Ultra Range y Era, complementando cada look de manera cómoda y lujosa.
La libertad es otro elemento sustancial de la firma. Hablamos de una libertad contemplativa y serena que se nutre del movimiento del cuerpo al portar la ropa como una segunda piel. La sensación de estar cómodo con uno mismo es parte del objetivo de Park, pues al momento de diseñar todo su corazón y mente están ahí para crear siluetas estudiadas, inteligentes en el sentido de portabilidad y que no marchen en pos de las efímeras tendencias de moda.
Boribat, la segunda colección de Shinae Park, es una respuesta a lo que la industria de la moda necesita hoy en día. Sus valores ideológicos previamente descritos son fundamentales pero también denuncia de cierta forma a un sistema regido por el consumo acelerado y por lo tanto, el desperdicio cada vez mayor. Esta colección nos recuerda que hoy en día la ropa debe ser apreciada, amada por quien la porte. Procurar nuestra segunda piel es una tarea placentera que no sólo consiste en comprar continuamente, sino también de hacer una pausa: sentirla, quererla y disfrutar un sorbo de libertad.