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Culture
El cuerpo: un viaje a través de la ilustración
15.06.2020
Por Sara Castañon

Los últimos meses me han permitido conocerme a profundidad y cuestionarme la relación que tengo con mi cuerpo y cómo la proyecto al exterior. Ha sido un viaje muy complicado, con momentos muy buenos y con otros no tanto. Todo esto me llevó a indagar más sobre las distintas relaciones que tenemos con nuestro propio cuerpo en cuarentena y en la vida diaria a partir del arte.

En este artículo quiero conocer las visiones de otres creadores y cómo sus trabajos les ayudan en esta aventura tan humana. Hoy les presento a tres ilustradoras mexicanas (que casualmente todas tienen nombres que empiezan con “Mar”) y cómo el cuerpo es parte de sus creaciones.

Maricarmen Zapatero

Las ilustraciones de Maricarmen son un abrazo al corazón, hay una familiaridad hogareña que te atrapa. Sus imágenes parten de un personaje femenino realizando acciones universales que nos hablan a través de sensaciones.

“El cuerpo se vuelve un símbolo que complementa a la idea, ya sea un texto o la misma imagen dentro de la que habita; es una especie de vehículo que le da forma a las sensaciones sobre las que quiero hablar”

Las figuras femeninas de Maricarmen no cumplen con los estándares, sino intenta reflejar a muchas de nosotras. Podemos conectar con sus ilustraciones porque nos reconocemos en ellas, en las apariencias cotidianas y el cuerpo que puede ser imperfecto y hermoso a la vez.

“La belleza tiene muchísimos matices, no está en un estándar que alguien decidió hace mucho tiempo, sino en la naturalidad de sus formas. Para mí es un modo más sincero de contar historias”

Sobre cómo la ilustración ha contribuido en su relación personal con el cuerpo, Maricarmen se ha permitido encontrar una belleza que antes le parecía imposible. Plasmar cuerpos que no responden a las ideas canónicas logra que no sólo nosotras nos veamos reflejadas, sino ella pueda explorar su cuerpo y existencia dejando de replicar las mismas imágenes que a muchas personas nos ha orillado a tener una relación complicada.

Sigan todo su trabajo aquí.

Margarita Osés

Dibujos blanco y negro en contraste, línea fina y la sensación de que hay algo no dicho flotando en el ambiente. Margarita dibuja una mujer cotidiana, cambiante, llena de deseos y libertad. Es una figura femenina desnuda en escenas de ensueño y erotismo.

“Busco que mis expresiones muestren lo que siento y que otras personas puedan verse reflejadas entre las líneas y siluetas de cada uno de mis dibujos, así ellos puedan contarse sus propias historias.”

A través de ilustraciones sencillas y cargadas de emoción, ha logrado observar y sentir su cuerpo. Es más consciente de cómo se mueve y siente cada parte que la conforma. Es un crecimiento mutuo: sus dibujos, que expresan las experiencias que ha vivido y su cuerpo, que cada día cambia, y la relación se va haciendo más estrecha.

Pueden ver más de sus ilustraciones aquí y seguir su trabajo en serigrafía acá.

María León

Los personajes de María tienen un toque caricaturesco; con una nariz y rostro que los diferencia de otres ilustradores. Todes tienen una personalidad viva y usualmente están acompañados de algún texto. Dibuja la relación que tiene consigo misma, pero sabe que hay más mujeres allá afuera que sienten lo mismo, abre una puerta para que se hable de los temas difíciles e incómodos que muchas tenemos con nuestro propio cuerpo y que a veces no sabemos dónde hablarlo o si estamos solas.

“Cuando representan cuerpos gordos en los medios casi siempre es desde la burla y la comedia. Yo trato de no hacer eso. Quiero que mis ilustraciones reflejan que las personas gordas somos multidimensionales. Tenemos deseos, experiencias de alegría y tristeza, tenemos voz.”

María me cuenta que ilustrar es una constante batalla contra esa parte que nos exige replicar la belleza hegemónica: cuerpos delgados, sin imperfecciones, altos. Entonces dibuja mujeres como ella y como la gran mayoría: mujeres chaparras, con vello, con estrías, y lo hace desde un lugar lleno de amor.

Para ella, la parte más importante ha sido poder dibujarse y para ello ha aprendido a mirarse tal y como es. En un proceso turbulento que muchas vivimos. Ha logrado emprender el camino hacia la reconciliación y aprender de sí misma contando su historia, hablando desde su sentir y su experiencia.

“Estoy dibujando sobre mi vida y para comunicarme con les demás, y ninguno de nuestros cuerpos es perfecto, ¿por qué, entonces, es tan difícil imaginar nuestros cuerpos como protagonistas de nuestras propias historias?”

Conozcan más de su trabajo aquí.