keyboard_arrow_left
close
keyboard_arrow_right
Culture
Imaginación comestible y ¡suppa' kawaii!
24.07.2020
Por Arianna Bustos

Los scrolls infinitos durante la pausa necesaria por el Covid-19 nos han llevado a conocer propuestas gastronómicas que elevan la imaginación comestible. Colmadas de motivos kawaii (como nos gustan), de colores y formas que emocionan desde antes de comerlas nos topamos con Sandwich Lab.   de Mariana Camarena que llevó su formación como diseñadora y su amor por los emparedados a un proyecto culinario desde hace un año y que despierta la magia de comer y disfrutar.

“Originalmente eran mi desayuno nada más. Mi momento de alegría y despeje. Aún los sigo desayunando, pero con la diferencia de que ahora los preparo también bajo pedido (…) yo me hago cargo de servicio a cliente, diseñar los sandwiches, prepararlos, tomarles fotos, actualizar redes sociales, tomar pedidos, compras y logística de envíos, jajaja. Es una locura total, pero me encanta”, me contó sobre sus inicios y logística que también resulta alucinante.

Dice que las herramientas cambian, porque ahora en lugar de trabajar digitalmente en Illustrator, lo hace sobre una mesa con pan e ingredientes reales, pero la actividad para ella es la misma: un ejercicio creativo.

“Todos los sándwiches que preparo sobre pedido son un reto ya que muchas veces ni yo misma sé exactamente cómo los haré, y es un ejercicio de diseño que siempre debo ejercer, mucho antes de preparar como tal: investigo, busco referencias, hago bocetos, y muchísimas cosas dentro de la planeación antes de siquiera entrar a la cocina”, explica Mariana.

En su cuenta se pueden ver a las Sailor Scouts promoviendo el consumo de sándwiches y figuras que nunca antes imaginaste ver en esta versión, como El Hijo del Hombre de René Magritte o el Ecce Homo de Borja.

“Mis sandwiches favoritos son los que hice de Studio Ghibli y una serie de inspirada en obras de arte. Suelo decir que el último set es mi favorito, ¡y es verdad! Me encanta mi trabajo y el momento de ver los sets hechos (después de toooodo el trabajote que está detrás) me provoca una alegría inmensa. Soy muy afortunada por poder compartir este gusto con muchísimas más personas”, concluye.

 

La búsqueda por las opciones comestibles cargadas de simbolismos, colores e imaginación “tangible” no ha parado ahí. Les comparto algunas otras con las que me he encontrado y que ya están en mis pendientes a explorar (en México y el mundo):

Capas de colores en Himawari

Escenarios de Hoshitae

Lucky Charms ice cream de Sweetmonstermx

Los lattes de Cafec.mx

Los chor muang (entre muchos de sus platillos con tonos morados), de Galanga Thai House 

Los paisajes pasteleros de Cata con Amor

Los ichiago sando, que son tendencia

Y así, etcétera y etcétera