Cuando la ciudad nos mata del aburrimiento, las ropas vienen al rescate. En este editorial de moda fotografiado por Lily Carmesí nos despierta esa sensación de que todo es posible aun en los sitios más ordinarios; resaltar en lugar de camuflajearse y ser con todas nuestras ganas de pasar solamente un buen día.
Tomamos las calles catalanas entre pelucas de colores, vestidos brillantes y mucha actitud, ¡sigue scrolleando!