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Highlights
¿En quién pensamos cuando diseñamos?
07.02.2025
Por Edna Pedraza

Un jueves de otoño en Mercedes Benz Fashion Week México, estaba bebiendo una cerveza con mis nuevxs amix de la moda, a quienes entre desfiles había conocido por mi compañera de aventuras de esa tarde; cuando nos invitaron a tomar asiento en el desfile que estaba por empezar. A mi lado se sentó un grupo de modelos que habían caminado para Diego Zuñiga, así que no pude evitar entrar en modo coqueto, sin saber que eso me llevaría a una espiral de pensamientos. Especialmente a preguntarme, ¿en quién se está pensando cuando se hace moda en México?

Después de unos minutos de introducción –el desfile ya había comenzado– el más guapo de ellos me soltó un ‘¿pero dónde usas eso?’. Llevándome a mirar nuevamente una pasarela que había perdido mi atención con sus monótonos looks en beige y negro, para luego encontrar un vestido corto con una forzada y larga cola arrastrándose por atención. “Ciertamente no en el metrobús”, contesté, aprovechando para insertar una sonrisa patrocinada por lo absurdo de un pedazo de tela queriendo ser moda.

Lo absurdo de ser moda

Desde ese día tuve un par de conversaciones donde pude revisar algunas notas que ya desde Fashion Forward daban vueltas en mi cabeza –de hecho un poco antes– cuando en el verano me sumergí en un maratón de Making The Cut, presentado por el icónico dúo Heidi Klum y Tim Gunn; y que me acompañaron también a las presentaciones finales de estudiantes de IES Moda, de Centro y de la Universidad Iberoamericana: ¿en quién están pensando lxs diseñadores cuándo crean? Es, sin duda, una de las preguntas más importantes y la más difícil de responder.

Si no me equivoco fue durante la segunda temporada de Making The Cut que uno de los participantes señala la preferencia por el jurado, en el cual figura el diseñador Jeremy Scott, por vestidos de alfombra roja sobre las propuestas de street wear. En Fashion Week precisamente uno de los temas entre mis conversaciones fue la fantasía de la moda. Un fotógrafo nos compartía cómo había disfrutado de las glamurosas propuestas de un par de diseñadores que a mi parecer han acaparado una plataforma que se supone presenta lo próximo en la moda hecha en México, para edición tras edición presentar las mismas siluetas del catálogo de su zona de confort.

La fantasía de escapar

¿Cuál es esa fantasía de la moda mexicana? ¿Otro vaporoso look de cóctel en chifón y color blocking? ¿es eso relevante o sostenible para un negocio de moda, en México, en 2025? Como parte del proceso creativo, ¿estamos considerando tendencias? ¿Cuáles son nuestras fuentes? ¿Esta moda que vemos es una propuesta para el mercado local? ¿considera la economía y las necesidades de éste, o prefiere aferrarse a un obsoleto glamour aspiracional con la ilusión de alcanzar un consumidor internacional?

Es más fácil encontrar en los eventos de moda en México, propuestas que ya existen en tiendas de fast fashion a precio de tienda departamental inglesa, que algo verdaderamente disruptivo, o por lo menos auténtico.

“Creo que la apatía que a veces se percibe no es tanto apatía, sino más bien miedo a equivocarse. México ha mirado la moda a través de una lente occidental y eurocentrista por mucho tiempo, lo cual ha generado la sensación de que hay un “camino correcto” que deben seguir. Esto lleva a los estudiantes a quedarse en zonas seguras, creativamente hablando, porque les resulta más fácil replicar lo que ya conocen que arriesgarse a explorar lo desconocido”.

Guillermo Huerta

¿Más educación?

El año pasado, además de empezar a dar clases en una universidad especializada en moda, me di a la tarea de observar las colecciones de estudiantes de otras instituciones, encontrando que la mayoría de las veces estxs creativxs en formación se limitan a siluetas y paletas de color básicas. Guillermo Huerta, director de la carrera de Diseño Textil y Moda en CENTRO, está también al tanto de cómo en las propuestas de las escuelas se puede sentir el miedo a equivocarse, a salirse de ese camino que marca la estética occidental.

Así entre las marcas ya establecidas que prefieren repetirse temporada tras temporada, que muy pocos bolsillos mexicanos pueden permitirse, y las propuestas en las escuelas que se quedan cortas por temor a alejarse de lo que la historia de la moda –una historia y una estética eurocentrista, señalada como deseable– y un mercado que, al final de cuentas, encuentra en internet todo tipo de opciones tanto para gustos como para bolsillos, me vuelvo a preguntar ¿para quién estamos diseñando moda en México?

Foto de portada Edgar Morales Primavera-verano 2025 por Denisse Hurrle para MEOW Magazine