Sofia Isella es una chica norteamericana multiistrumentista que a los 3 años aprendió a tocar el violín, a los 15 años comenzó su carrera como compositora y a sus 20 años ha llegado a redefinir el camino para las mujeres productoras en la musica independiente. Ella simplemente se define a sí misma como: “A Slut for Words”.
When everyone’s together, everyone’s alone…
Tan elocuentemente divertida y arriesgada, Sofia no teme hablar de la depresión, la salud mental, el sexo, el cambio climático y, por supuesto, el empoderamiento femenino, haciendo uso de violines, guitarras, arreglos de piano y sintetizadores combinados con mucho sarcasmo y humor negro para lanzar criticas mordaces a un mundo cada vez más hostil; tampoco le asusta la idea de burlarse del concepto de artista y tener la astucia de señalar que todo el conocimiento a nuestro alcance nos ha vuelto unos tontos, en una clara referencia a las redes sociales… ¡Vaya forma de comenzar su carrera!
Por si esto fuera poco, Sofia también es quien compone y produce sus propias canciones, y desde la salida de su primer EP ‘I’m not Yours’, se ha mantenido a cargo de todo proceso creativo y artístico, desde el arte de sus sencillos, hasta la grabación de sus canciones, convirtiéndola en uno de los actos musicales más completos y genuinamente honestos de esta década.
Desde sus inicios, la imagen de Sofia tanto en presentaciones en vivo como en sus videos, recuerda mucho a la de Trent Reznor y Al Jourgensen a inicios de los 90, cuando NIN y Ministry se encargaron de llevar el sonido del industrial al mainstream.
Para Isella, ese look sucio y grasoso representa justamente lo que ella quiere mostrar en vivo: un aspecto desfachatado y caótico, poco atractivo para la mirada masculina, con ropa tan holgada y rota que genera reacciones de desconcierto, como si tomara la estética del grunge y el industrial y la llevara más allá de lo socialmente aceptable y aun así, logra capturar la atención del público en todo momento.
She’s too pretty for her own good
En ese sentido, tanto su voz y su postura frente al Male Gaze de la industria musical, nos recuerda mucho a Billie Eilish y Shirley Manson en su lucha contra la hiper sexualización de sus cuerpos e incluso a la poderosa voz de Fiona Apple, cuando se trata de exponer el acoso y los abusos que la gran mayoría de mujeres sufren día a día, a través de sus canciones y sus poemas…
“Our women are cattle, there’s blood on our kids
Are you being paid to not pay attention?
Does it have to happen to your mother
To your sister or your daughter
For you to take it personal? Oh..So, pump us full of sperm, put us in a barn
Us and pigs on a Mississippi farm
In nine months, we’ll have a kid you won’t care about
And if the kid’s not straight, white and male
We guarantee a living hell
Murder in the name of a loving God”
Para su últimos dos EP’s, Sofia recurre al body horror de películas como ‘Titane’ y ‘The Substance’ para transformar su aspecto físico tanto en sus portadas como en sus videos, mostrándose como un ser amorfo, oscuro y desconcertante…
The words are different but the song’s always the same
Gracias a su propuesta disruptiva y una presencia que va más allá del streaming en tiktok, Sofía llamó la atención de Taylor Swift y Melanie Martínez en 2024, quienes de inmediato reconocieron su potencial y la invitaron a ser su acto de apertura durante sus giras internacionales, conociadas como The Eras y Portal Tours, respectivamente.
Por todo esto (y por mucho más), no podíamos dejar pasar a Sofía Isella en nuestra sección musical, quien por supuesto es LA recomendación de desborde emocional, feminismo crudo y sensibilidad musical que no te puedes perder. Una verdadera reina del performance que con su voz, sus versos y sus guitarras, construye universos que parecen casi una confesión que redefine el poder de ser escuchada en pleno 2025.