Veintiséis mujeres artesanas provenientes de 11 municipios del estado de Querétaro, México, presentaron la colección ‘Fortaleza’ en una exhibición que presenciamos junto a un panel con agentes clave del proyecto en el Hotel Geneve.
Esto sucedió como resultado del programa ‘Fashion Expressions: Las historias que vestimos en Querétaro’ organizado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas(UNFPA) que en esta ocasión se asoció con Prada Group y Nestpara poder llevarlo a cabo.
Grupo Prada y UNFPA celebraron su primer programa de formación en moda en México, UNFPA.
¿De qué va este programa?
Mariarosa Cutilo, Jefa de la Rama de Asociaciones Estratégicas del UNFPA, comentó en el panel conformado por diferentes involucrados del proyecto como Galo Bertín, diseñador de moda y asesor del programa; Adriana Barrón, artesana de San Juan del Río, Querétaro; Estela Porfirio, artesana de Amealco, Querétaro e integrante del Programa, Emilienne Limón, Asesora del Programa de Artesanías de México de Nest, y moderado por Farah Slim, Directora Editorial de Contenido en Glamour México y Latinoamérica, que el programa se creó con la intención de proporcionar herramientas y conocimientos a mujeres de poblaciones vulnerables para su salud reproductiva, autonomía económica y prevención de violencia de género a través de la moda.
El programa se creó con la intención de proporcionar herramientas y conocimientos a mujeres de poblaciones vulnerables para su salud reproductiva, autonomía económica y prevención de violencia de género a través de la moda.
En 10 meses el Programa pretende capacitar a las artesanas respecto a estos temas, considerando la etapa de negocios dentro de la moda donde las mujeres reconocen el valor de su trabajo artesanal, el tiempo invertido y el conocimiento que han adquirido a lo largo de su trayectoria, pues como comentó Carolina Julián Pascual, artesana de San Ildefonso Tultepec, Querétaro, para Meow Magazine, ella lleva entre 28 a 30 años realizando trajes tradicionales.
La colección ‘Fortaleza’ y su impacto en la vida de las artesanas
La colección se conforma de 20 diseños de moda femenina donde vestidos de gala, camisas, pantalones anchos, chamarras, chales, conjuntos de tops y faldas resaltan por los bordados típicos y tejidos hechos a mano.
‘Fortaleza’ es el resultado de seis meses en los que, como comentó el diseñador de moda masculina y asesor del Programa, Galo Bertín, tuvieron una clase de 2 horas mensualmente, donde acercó a las artesanas a su visión de la moda con pasarelas de diseñadores de alta costura, entre otros, para que ellas crearan y bocetaran su propio diseño experimentando con siluetas distintas a las que acostumbran. El diseñador acompañó en la parte técnica del patronaje, costura, montaje y asignación de telas con las que ellas no acostumbran a trabajar.
Innovación artesanal
Carolina Julián Pascual, artesana de San Ildefonso Tultepec de 44 años, nos compartió detalles de lo que la inspiró para hacer su diseño y también del hermoso traje típico de la comunidad otomí de la que proviene y portó el día del evento.
A mí lo que me inspiró fue salir adelante, dar a conocer mi trabajo mas allá de lo que hacemos y de lo que somos. La prenda la hice pensando en el bordado; un bordado que utilizamos para nosotras pero que es muy pequeño, entonces lo hice en grande para ponerlo en la parte de arriba del vestido. La técnica es hilván pepenado. Las estrellas son parte de nuestro día a día, por eso la puse en el bordado
Que las mujeres artesanas cuenten con la libertad de decidir qué bordar y cómo compartir sus iconografías es su derecho y forma parte del Decálogo del Saber Textil Ancestral, una iniciativa de NGOImpacto en donde han participado diversos personajes y capacitadores en pro de la preservación y comercio ético de las culturas.
“El azul marino lo escogí porque nosotras siempre usamos blanco y se ensucia mucho y se mancha, y dije un color que no se ensucie tanto y tenga una presentación donde resalte, y fue hacerlo más oscuro, porque nosotras somos más coloridas. Fue mostrar que se pueden hacer diseños con colores más oscuros o combinaciones diferentes”
También comenta que este evento ha sido una oportunidad para dar a conocer su trabajo ya que esto usualmente solo se muestra en su comunidad, y para ella “ha sido un gusto trabajar de esta manera, haber logrado algo diferente de lo que comúnmente hago”.
“Somos orgullosas de llevar sangre indígena”
Sobre el traje típico que portaba Carolina, y otras artesanas junto con sus hijas el día del evento, nos compartieron que:
“Un traje tradicional se conforma de tres piezas. La falda está plisada, antes solo se hacían los pliegues, pero cuando llegó la electricidad al pueblo las comenzamos a plisar; el mandil lo utilizamos combinando el color de nuestro bordado; la blusa original de nosotras ahora es otro tipo de blusa, con el tiempo se fue cambiando e innovando y ahora ya tenemos una variedad de blusas; la original todavía la estamos rescatando, es la que tiene más valor para nosotras, porque es lo que nos dejaron. Nosotras ya fuimos agarrando de lo que ahora la gente usa, pero la tradicional es muy bonita, y estamos en eso, luchando porque no se pierda”.
Todos los bordados representan iconografías que definen su identidad y su comunidad. Están relacionados con la naturaleza: árboles, plantas, animales y flores. Agregan que, “todo lo que podemos encontrar en nuestra comunidad es lo que va bordado. El cuellito también es bordado a mano, es un adorno extra que hicimos, ya con el paso del tiempo lo fueron cambiando.”
Carolina, junto con otras seis artesanas que también integraron el programa, están por lanzar un proyecto de textiles hechos a mano en Querétaro titulado ‘Siete Cocos’. Así que estemos al pendiente porque en noviembre, para cuando el programa haya culminado, quizá ya podamos conocer su innovadora propuesta.
Valorar las raíces indigenas de nuestro país
Es una pena que la exposición no haya estado abierta al público durante algunos días más para que un mayor número de personas pudiera apreciar el esfuerzo y dedicación de las artesanas quienes trabajaron durante meses en este proyecto. Estas obras no solo reflejan siglos de conocimiento y tradición cultural, sino que también proyectan la innovación y la creatividad de mujeres que luchan por salvaguardar su patrimonio cultural. Creemos que su trabajo merece ser visto y valorado por una audiencia más amplia.
La sensibilización surge del entendimiento, y es crucial conocer la propia cultura de la que provenimos, o bien, que compartimos. Quienes se involucran en proyectos textiles con artesanas y artesanos de los Pueblos Originarios deben asumir la responsabilidad de educarse y capacitarse, para comprender la importancia de sus técnicas y materiales, respetando sus saberes y su labor. Sería valioso considerar perfiles ya comprometidos con los objetivos del programa y con las comunidades a las que se dirige.
Al mismo tiempo es alentador ver cómo marcas de lujo extranjeras como Prada apoyan iniciativas que no solo impactan positivamente en la vida de mujeres con talento y conocimiento, sino que también contribuyen a crear una fuente de ingresos más estable para ellas. Este ejercicio demuestra el poder de la moda como una herramienta para conectar temas complejos con comunidades y para fortalecer a mujeres que ya son muestra de resistencia.
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#INSPOWER Nos tomamos un cafecito con el artista oaxaqueño para platicar más a fondo sobre la raíz de su trabajo y el boom que ha originado en el mundo.